Los microorganismos dominantes en la microbiota intestinal son los bacteroidetes, firmicutes, proteobacterias, fusobacterias, tenericutes, actinobacterias y verrucomicrobios.
La microbiota intestinal son los millones de microorganismos diversos que normal y saludablemente habitan en nuestro sistema digestivo. La modificación en su composición depende de factores genéticos, ambientales (edad, uso de antibióticos, nacimiento por vía natural o cesárea), nutricionales (dieta), y puede influir en la permeabilidad intestinal, la digestión, el metabolismo y la respuesta inmune.
Cuando se altera el equilibrio de la microbiota, se produce un estado proinflamatorio que conduce a la aparición de enfermedades gastrointestinales (síndrome de intestino irritable, enfermedad inflamatoria del intestino), metabólicas (obesidad, diabetes, enfermedad cardiovascular, cáncer), inmunológicas y neuropsiquiátricas (ansiedad, depresión, autismo, alzhéimer).
Los microorganismos dominantes en la microbiota intestinal son los bacteroidetes, firmicutes, proteobacterias, fusobacterias, tenericutes, actinobacterias y verrucomicrobios; y están presentes desde la boca (en poca cantidad) hasta el colon (en mayor cantidad).
Entre las principales funciones de la microbiota intestinal están:
- Metabolizar los elementos de la dieta en compuestos bioactivos como los ácidos grasos de cadena corta, los cuales contribuyen a la formación de la mucosa protectora del intestino, y tienen propiedades antinflamatorias y anti carcinogénicas.
- Ayudar a la síntesis de vitaminas, como la biotina, tiamina, cobalamina, riboflavina, niacina, ácido pantoténico y vitamina K.
- Sintetizar sustancias neuroquímicas como el GABA, que protegen el sistema nervioso central y periférico.
- Ocupar la superficie de la mucosa del intestino, evitando la invasión de microorganismos dañinos.
- Regular la absorción de calcio y fósforo, minerales que impactan el crecimiento del hueso.
- Comunicar con el cerebro coordinando la producción de sustancias que controlan la permeabilidad intestinal, el sistema inmune y algunas funciones neurológicas.
Los factores que afectan la composición de la microbiota son:
- La dieta: los bebes alimentados con leche materna tienen una microbiota mas saludable, el consumo de fibra mantiene la integridad de la barrera mucosa del intestino y mejora el control de la glucemia, las dietas ricas en grasa incrementan la susceptibilidad a infecciones y al desarrollo de enfermedades metabólicas.
- La edad: a mayor edad (+65 años) se disminuye la producción de ácidos grasos de cadena corta, se reduce el número de bifidobacterias y bacteroides, y se incrementa el número de patógenos oportunistas.
- La genética: los factores genéticos afectan el número y composición de microorganismos que componen la microbiota.
- El ejercicio: la actividad física regular aumenta la diversidad de la microbiota intestinal, aumenta la producción de ácidos grasos de cadena corta, disminuye la inflamación crónica y protege al cerebro contra desórdenes psiquiátricos inducidos por el stress.
- Los antibióticos: los antibióticos destruyen tanto los microorganismos benéficos como los patológicos causando una alteración de la microbiota llamada “disbiosis”.
- El cigarrillo: los fumadores presentan una alteración en la microbiota de la boca.
- El impacto geográfico: aspectos como la atmósfera y la localización geográfica (países industrializados) también determinan la composición de la microbiota intestinal.
En los últimos años la investigación en microbiota ha aumentado. Todas las estrategias que ayuden a rebalancear la composición de la microbiota, deben ser tenidas en cuenta como un tratamiento efectivo para muchas enfermedades.
https://doi.org/10.1007/s10482-020-01474-7
https://academic.oup.com/nutritiunreviews/article/73/suppl_1/28/1819270
https://academic.oup.com/ajcn/article/107/6/965/499427
Excelente articulo!